
Cierre Mercados 02-07-24
Optimismo en Wall Street. Tras los dichos de Powell sobre que la economía estadounidense retomó el sendero de desinflación, el S&P 500 alcanzó un nuevo máximo histórico de 5.509 puntos (+0,6%).Optimismo en Wall Street. Tras los dichos de Powell sobre que la economía estadounidense retomó el sendero de desinflación, el S&P 500 alcanzó un nuevo máximo histórico de 5.509 puntos (+0,6%). En misma dirección, el Nasdaq y el Dow Jones cerraron en torno a los 18.028 (+0,8%) y 39.332 (+0,4%), respectivamente. Bajo este marco, la volatilidad en el mercado de renta variable disminuyó y el VIX achicó 1,6%, hasta los 12 puntos. Por otro lado, tuvimos buenas noticias en relación con el mercado laboral. Las vacantes de empleo (JOLTS) se situaron en 8.140 mil en mayo, por encima de los esperado (7.946 mil). ¿Por qué una buena noticia? La semana pasada Mary Daly, presidente del Banco de la Reserva Federal de San Francisco, hizo referencia a la curva de Beveridge, que muestra la relación entre la tasa de desempleo y la tasa de empleos vacantes. A medida que bajan los empleos vacantes, el desempleo suele aumentar. La lógica intuitiva sería que una empresa empieza bajando las ofertas de empleo y luego sigue con despidos. Por esta razón, si aumentan las vacantes de empleo mejora el trade-off entre ambas variables. En otras palabras, habría mayor margen para que disminuyan las vacantes y no se acelere el desempleo. Más allá de esto, que le brindaría un mayor margen a la Fed para mantener el higher for longer, el efecto de las palabras de Powell fue más fuerte. En esta línea, los rendimientos de los Treasuries cerraron a la baja. La tasa a 10 años recortó 3 pbs, hasta 4,43%, a su vez que el tramo corto (a 2 años) hizo lo propio en 1 pb, hasta 4,74%. Como resultado, el spread entre ambas finalizó en -31,4 pbs, y la volatilidad del segmento, medida por el Move, avanzó 1,2%. En lo que a commodities respecta, tanto los precios del petróleo como del oro observaron variaciones negativas. El crudo WTI cerró en 82,8 US$/bbl (-0,7%) y el Brent en 86,6 US$/bbl (-0,1%). Por su parte, la onza de oro al contado, representada por el índice XAU, se deslizó 0,1% a US$2.329. En cuanto a los datos que debemos estar atentos, mañana se dará a conocer la estimación de creación de empleo de ADP, y el viernes tendremos el reporte oficial del empleo de la BLS (nóminas no agrícolas, tasa de desempleo, evolución del salario, entre otros).
El mercado local se tiñó de rojo en la segunda rueda tras el anuncio del nuevo esquema cambiario, exhibiendo bajas más escuetas que las del lunes. Los Globales recortaron entre 0,7% y 1%, moderando las caídas de ayer de entre 1,8% y 3%. A diferencia de la jornada anterior, hoy hubo un clima favorable para los créditos emergentes con la tasa de los Treasuries comprimiendo, lo que quedó plasmado en una suba de 0,5% del ETF EMB. Por su parte, el peso argentino continuó depreciándose. El CCL, inversa del peso, aumentó 1,2% a $1.425, alzando la brecha a 55,7%, por lo que apenas quedó por debajo del máximo de la era Milei de 59,1% del 22/01. Con la brecha coqueteando con el pico de la administración actual, los bonos soberanos dólar linked avanzaron entre 0,8% y 3,2%, con excepción del TV25 que disminuyó 1,9%. En este contexto, nos sorprendió que los futuros de ROFEX exhibieran bajas generalizadas a lo largo de toda la curva. En particular, el tramo corto, que es el más relevante por acaparar gran parte del volumen operado, cedió entre 0,2% y 1,6%. A contramano de los Globales y el peso argentino, el Merval en dólares rebotó 1,5% a US$1.144, aunque todavía permanece 3,9% debajo del cierre del viernes. Más allá de lo que sucedió hoy particularmente con el equity, la reacción del mercado de los últimos dos días deja en evidencia que los inversores necesitan más definiciones sobre los parámetros a alcanzar para salir del cepo. Es decir, no alcanzó con el anuncio de un nuevo esquema monetario que redundaría en una tasa real positiva.